El sirope se extrae de las hojas o pencas del agave, una planta similar al aloe vera.
Se corta la planta cuando ha crecido entre siete y diez años, y se extrae la savia (aguamiel).
Mediante un proceso enzimático, se filtra y concentra para obtener el sirope de agave, con una textura similar a la miel.
El sirope de agave es doble de dulce que el azúcar común, gracias a su composición con un 70% de fructosa y un 25% de glucosa. Esto significa que necesitamos añadir menos cantidad a nuestros alimentos para obtener el mismo sabor dulce.
- CARACTERÍSTICAS
– Bajo índice glucémico.
– Mejora la absorción de calcio: Indirectamente, puede ayudar a combatir enfermedades como la osteoporosis.
– Estimula el sistema inmune y favorece el tránsito intestinal y la depuración del organismo.
- USOS
– El sirope de agave se utiliza como alternativa al azúcar común para endulzar bebidas, postres, yogures y otros alimentos.
– Bebidas: Puedes añadir sirope de agave a tus batidos, zumos o tés para darles un toque dulce sin aumentar bruscamente los niveles de glucosa en sangre.
– Salsas y aderezos: El sirope de agave se mezcla con otros ingredientes para crear salsas para ensaladas, carnes o pescados.
También se utiliza en aderezos para platos como el yogur con frutas.
– Repostería: Es un ingrediente común en la repostería saludable. Se emplea en galletas, pasteles, muffins y otros postres para reducir la cantidad de azúcar refinado.
– Cócteles: En la coctelería, el sirope de agave se utiliza para endulzar margaritas, mojitos y otras bebidas alcohólicas.